Mientras todos salimos pestañeando de unos años desconcertantes para los viajes, parece que 2023 es el año en que volveremos a la normalidad total. Vuelven los viajes sin límites, y las posibilidades son infinitas.
Con la crisis climática y las historias de turismo excesivo dominando los titulares, no se puede obviar que el turismo sostenible es importante. En pocas palabras, la forma en que viajamos debe cambiar para mejor.
Una forma eficaz de conseguirlo es volar menos, sobre todo teniendo en cuenta que las emisiones del sector turístico relacionadas con el transporte representan un porcentaje muy importante tanto de las emisiones mundiales del transporte como de las emisiones de gases de efecto invernadero de origen humano. Si todos optáramos por volar menos, se reducirían considerablemente las emisiones de carbono a la atmósfera.
Así que, tanto si está planeando tumbarse en la playa como embarcarse en un viaje lleno de aventuras, aquí tiene nueve brillantes opciones de viaje para disfrutar sin poner un pie en un avión.
1. Guernesey en barco
Paraíso de los amantes de las actividades al aire libre, Guernesey tiene pintorescas costas y hermosas playas. Y además está cerca de tierra firme: el trayecto en ferry a través del Canal de la Mancha dura sólo tres horas.
No se pierda el paseo por los acantilados desde Saint’s Bay hasta la playa de Petit Bot, u opte por el kayak de mar con Outdoor Guernsey para explorar las calas y bahías vecinas. Si tiene tiempo, tome el transbordador Trident de Summer Travel para pasar el día en la cercana isla de Herm, donde podrá pasar dos horas y media circunnavegando la isla a pie (no hay coches). Termine su estancia en la hermosa bahía de Belvoir, donde el aire fresco, las vistas al mar y la sedosa arena blanca le elevarán el alma.
2. Senderismo en el norte de España
Conocido como «las montañas y los bosques del oso pardo», el Parque Nacional de Los Picos de Europa es adorado por los lugareños por sus espectaculares paisajes de montaña, sus bonitas vistas a los lagos y sus variadas rutas de senderismo. A pesar de su energía épica, el parque ha permanecido relativamente fuera del radar turístico, simplemente porque es más difícil llegar a él que a otras regiones.
Si te gusta estar al aire libre, la excursión merece la pena. Los viajes en familia son más fáciles en coche: por el Eurotúnel hasta Francia y luego en dirección suroeste hasta España. Si no, el tren le llevará hasta Santander, donde Autobuses Palomera S.A. opera una línea de autobús dos veces al día hasta Potes, a las afueras del parque.
3. Interrail (no es sólo para mochileros)
Viajar en tren por Europa es, en general, fiable y cómodo. Además, le permite explorar a su ritmo, parando donde le apetezca para disfrutar de las vistas. Las rutas cortas más populares van a Praga, Budapest o Múnich, mientras que los viajeros con más tiempo pueden llegar hasta Sofía (Bulgaria) o Riga (Letonia).
El Interrail Global Pass le permite elegir de antemano cuántos días de viaje necesitará dentro de un plazo determinado. Si prefiere improvisar, el Global Pass Ilimitado le ofrece viajes en tren sin restricciones durante un mes. La mayoría de los trenes locales están incluidos, por lo que podrá explorar regiones menos visitadas, como los humedales de Rumanía, ricos en vida salvaje.
4. Conducir por la costa este de Irlanda
Si empiezas en Gran Bretaña, el ferry desde Fishguard, en Gales, hasta el puerto de Rosslare, en la costa este de Irlanda, tarda tres horas y 30 minutos. La ventaja es, por supuesto, que dispondrá de su propio coche para este pintoresco viaje por carretera hasta Dublín.
La ciudad costera de Wexford está a 20 minutos del puerto, mientras que el cercano castillo de Enniscorthy -donde se rodó la película de Hollywood Brooklyn- alberga una exposición que detalla la historia de la región. También puede pasar una noche en el encantador balneario Monart, sólo para adultos.
Más al norte, la playa de Arlow es un lugar discreto para disfrutar de la salvaje costa irlandesa, mientras que los escarpados acantilados de Wicklow ofrecen espectaculares amaneceres. Hay ferrys de ida y vuelta de Dublín a Holyhead.
5. De isla en isla hasta Gozo
Merece la pena saborear cada punto de este viaje, desde el trayecto de París a Livorno o Nápoles, ya sea en Interrail o en coche, hasta el viaje en ferry a La Valeta (Malta). Incluso el tranquilo trayecto en barco de 30 minutos desde el puerto de Cirkewwa hasta Gozo es encantador.
La diminuta isla, de apenas 37.000 habitantes, es rica en cultura local gozitana y arquitectura barroca. Ya sea paseando por la ciudadela medieval, tomando el sol junto a la piscina con buganvillas de fondo o degustando un buen vino tinto en una plaza, es un hermoso lugar para relajarse.
Yuniet Blanco Salas